Luego del éxito que tuvo el año pasado con la obra "Todo puede fallar"; Diego Doello decidió reestrenar una obra que hizo en dos oportunidades anteriores. Se trata de "Los hijos de Eva", con una importante carga de historia Argentina. La historia gira en torno a un pabellón de internos del Borda, el cual es llamado "El pabellón de los Hijos de Eva", en donde cinco internos pasan por diferentes situaciones y se muestran tal cual son. Con una excelente puesta y un gran trabajo de guión, la historia pasa de la risa a la reflexión en cuestión de segundos.
Julián Outeda encarna a Jorge, un interno nuevo del instituto, que llega para quedarse pero con mucha bronca y resentimiento para con su padre, que lo internó allí. El personaje deberá intentar acoplarse a convivir con internos de hace mucho tiempo, y poder descifrar el motivo de su llegada al Hospital. Con una cuota de dulzura y otra de bronca, Julián le da vida a un personaje central de manera excelente, que en determinado momento de la obra conmueve a la platea hasta las lágrimas.
El personaje de Arturo, es inerpretado por Ezequiel Martínez, y es sin duda exquisito a nivel actoral. Arturo es mudo, pero pese a eso, es quién más habla. Habla con los ojos, con la mirada, con las actitudes y hasta con lo que no hace. Ezequiel logra mantener la patología del interno durante toda la función, y hasta impone acciones que repite constantemente.
Juan, quién es el primero en decir que es hijo de Eva Duarte, representado por Ulises Puiggrós, se impone como "el padre" del pabellón, y la contención más importante de Arturo entre los internos. Juan está loco, como todos, pero aún así, se cree el más cuerdo. Ulises es quién abre la historia y le da la posibilidad a cada uno de los otros actores a lucirse, al mismo tiempo que él también lo hace.
Diego Schmukler en la piel de Domingo, es sin duda uno de los personajes más divertidos de la historia. Si bien al comienzo muestra un costado militar, Diego muestra oficio y "escenario gastado" a la hora de encarnar diferentes personalidades causando en todas una distinta sensación. Emanuel García interpreta a Rosendo, el enfermero del hospital que se ocupa de servirle a los internos, pero que mantiene una relación muy particular. Con un carisma y desfachatez importante, Emanuel se lleva varios aplausos y carcajadas al decir su texto y ponerle parte de su humor.
Jesús está representado en Santiago López. Como su nombre lo indica, él está convencido que es el hijo de Dios y hace todo para demostrarlo. Siempre simpático y con salidas impensadas, Jesús le da color a la historia. Por último, Raúl Santoandré encarna al doctor del Borda, que aparece en esporádicas escenas para controlar y ponerle orden al pabellón de los hijos de Eva.
La obra se puede ver todos los sábados en el Auditorio Losada, Corrientes 1551 a las 23.
Mirá las fotos del estreno:
Muchas ganas de ver esta obra!
ResponderEliminar